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Cartas el editor

Cartas sobre: "La terquedad de América Latina"

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    16 noviembre, 2023

    ¿Cuánto ha influido el analfabetismo poblacional y la religión en los delirios identificados por Granés?

    Señor editor:

    Lamentablemente, aún no he podido leer el libro "Delirios americanos" de Granés. Sin embargo, en el ensayo-reseña de la profesora Naudón es posible aproximarse a lo que Granés describe como "delirios".

    Según Naudón, los tres delirios descritos por Granés son: (i) la identidad americana en consideración a la construcción de una cultura; (ii) la fantasía a través del arte: mitos, leyendas y creencias mágicas; y (iii) la historia como fuente cohesión para la narrativa revolucionaria. Básicamente, y si entendí bien la síntesis de Naudón, estos tres delirios atentarían con la frágil estructura institucional de cualquier democracia liberal.

    Si el resumen anterior es cierto, entonces, para ampliar el elaborado trabajo realizado por Granés habría que preguntarse cuánto ha contribuido el analfabetismo poblacional y la creencia en religiones como la católica, por ejemplo, en la absorción social de tales delirios en la población. Este sería un examen no menor al fenómeno. Pues, de alguna u otra forma, se debe explicar cómo estos delirios permean en la población de tal manera que grandes mayorías apoyan hasta con sus vidas estas revoluciones que "los liberarán" del algo que no sabemos muy bien qué es, y que, además, siempre acaban por someter a dicha población a los estragos de las más surrealistas tiranías.

    ¿Qué papel ha tenido el sistema educativo (en las aulas) estos grandes relatos? ¿Cuánto ha influido la falta de racionalidad, pensamiento crítico, aritmético y analítico en partes importantes de la sociedad para que dichos relatos tengan cabida? ¿Qué otros factores determinan que el pensamiento mágico permee en las grandes masas para que tales revoluciones tengan cabida? Ante esta última pregunta, imagino que la desigualdad histórica en América Latina ha ayudado en el proceso. No obstante, ¿cómo no sospechar de estos grandes relatos? ¿Cómo creer que por medio de estos la realidad cambiará para mejor y no como usualmente lo hace: para peor?

    En este sentido, pude notar por medio del escrito de Naudón que Granés describe una forma de hacer política muy nuestra, pero no explica el fenómeno, desgraciadamente. Es decir, no llega a posibles causas ni tampoco delinea ideas sobre cómo atajar estos tipos de comportamientos políticos tan nefastos para nuestro continente. Quizá, no sea trabajo de Granés hacerlo, pero considero que la profesora Naudón debiera ensayar al respecto.

    José Ignacio Mansilla